La decisión de ir a estudiar al extranjero tiene un gran impacto positivo tanto a nivel personal como profesional. Cualquier estudiante que haya tenido la oportunidad de irse al extranjero dirá que es una experiencia única que le cambió la vida.
Pero ¿por qué es tan beneficioso irse a estudiar fuera? Bueno, tanto a corto como a largo plazo, tu estancia en el extranjero te abrirá las puertas a numerosas ventajas que de otra forma no tendrías. Aprenderás a conocer y respetar otras culturas, tomarás decisiones por ti solo y dominarás una lengua que no es la tuya.
¿Por qué estudiar en el extranjero?
Estudiar en el extranjero es una de las mejores decisiones que puede tomar un adolescente o cualquier trabajador junior. Vivir y estudiar en un país que no es el tuyo significa salir de tu zona de confort, tener la capacidad de enfrentarse a nuevos retos y, sobre todo, contar con ganas de aprender.
Las ventajas que te ofrece el hecho de cursar tus estudios superiores en el extranjero pasan por diferenciar tu currículum, ya que las experiencias internacionales son muy valoradas por las empresas, y por enriquecerte personalmente. Las estancias en el extranjero se traducen en un conocimiento único de otras culturas y maneras de vivir, y demuestra tu tolerancia y aprecio por lo desconocido.
Experiencia única
Estudiar fuera de tu país es una de las mejores experiencias que recomiendan quienes ya lo han probado. Los estudiantes de erasmus y los que tienen la oportunidad de realizar estancias en el extranjero durante el verano coinciden en que vivir y estudiar fuera de casa es una experiencia única.
Este viaje al extranjero para cursar tus estudios es una oportunidad fantástica para conocer a mucha gente, procedente de culturas y ambientes muy distintos al tuyo y enriquecer así tu visión del mundo. Además, te encontrarás fuera de tu zona de confort y tendrás que valerte por ti mismo en muchas ocasiones, por lo que crecerás personalmente.
Ampliar red de contactos, una de las principales razones para ir a estudiar al extranjero
Durante tu estancia en el extranjero conocerás tanta gente que tu lista de contactos engordará considerablemente. Pero no solo grabarás en la agenda números de teléfono, sino que agregarás a muchísimos profesionales en portales como LinkedIn.
El hecho de estudiar en el extranjero implica conocer a personas de todas las nacionalidades además de la población local de la región a la que vayas. Gracias a Internet podrás mantener el contacto con todos ellos y, quien sabe, trabajar incluso con ellos en un futuro.
Perfeccionar un idioma
Desde que te despiertas hasta que te acuestas tu cerebro está enfocado en el nuevo idioma, por lo que interiorizas el lenguaje y aprendes a mayor velocidad. Lo mejor de vivir fuera es que tu aprendizaje del idioma es constante, ya que cualquier actividad que hagas la tendrás que desarrollar en ese idioma nuevo.
La interacción diaria con las personas nativas e internacionales que te encuentres durante tu estancia en el extranjero impulsará notablemente tu fluidez en la expresión oral del idioma. Además, notarás que tu acento mejora.
Aprender a ser autosuficiente, un motivo de peso por el que ir a estudiar al extranjero
Romper el cascarón, salir del nido… Expresiones que no se hacen realidad hasta que las vive uno mismo. Si hay algo que debes saber antes de ir a estudiar al extranjero es que no vas a parar de aprender nunca, tanto personal como profesionalmente.
Durante tu estancia internacional irán surgiendo situaciones que deberás manejar solo y tendrás que tomar decisiones por ti mismo. Y todo ello te enseñará a medir las consecuencias, a sopesar las opciones y, sobre todo, a aprender de los errores.
El hecho de estar en un entorno nuevo y desconocido te permitirá explorar tus límites y tus capacidades. Además, tendrás tiempo para conocerte a ti mismo y descubrir cuáles son tus fortalezas y debilidades.
¿Cómo será ir a estudiar al extranjero?
Ir a estudiar al extranjero puede ser tu primera oportunidad para salir de tu casa y de tu país de origen durante un tiempo y, aunque es un paso muy emocionante, puede que te intimide un poco.
Con sinceridad, salir de la zona de confort no es fácil y puede que te resulte complicado al principio, pero una vez que das el paso y te encuentras en un nuevo país para cumplir tu objetivo, comprobarás que estás aprendiendo mucho sobre diferentes aspectos.
Adaptarse es lo más complicado
Adaptarse a un nuevo centro educativo, a un nuevo barrio, a una nueva cultura y en un nuevo país, todo de golpe, puede resultar complicado. Por ello, el mejor consejo que alguien te puede dar es que tengas paciencia.
Recuerda que las cosas de palacio van despacio y que nadie va a esperar que te sientas como en casa a los dos días de aterrizar en el país que hayas elegido. Con el tiempo aprenderás qué es lo que te gusta o dónde te sientes más cómodo y acabarás encontrando tu lugar.
No puedes controlar todo antes de viajar
Un aspecto a tener en cuenta antes de irte a estudiar al extranjero es que no puedes controlarlo absolutamente todo antes de viajar. Existen aspectos que no puedes tener bajo control hasta que llegues al país elegido y no pasa nada. Habrá cosas que no sepas cómo hacer hasta que las tengas de frente y hay otros elementos que no dependen de ti y que debes aprender a asumir.
Conocer gente, una de las ventajas de ir a estudiar al extranjero
Puede que uno de los aspectos que más te preocupen de irte fuera sea el hecho de conocer gente y hacer amigos nuevos, pero hay gran cantidad de personas que se encuentran en tu misma situación.
Es probable que, al sumergirte en un ambiente de interculturalidad, te preocupe ofender a alguien o no comprenderlo lo suficiente, pero con el tiempo y a base de tratar a esas personas te darás cuenta de que no existen tantas diferencias. Puede que tardes más, pero seguro que haces un montón de amistades.
No dejes de lado a la familia
Si hay alguien que te va a echar de menos cuando vayas a estudiar al extranjero es tu familia. También tus amigos de toda la vida notarán tu ausencia y te echarán en falta y puede que no te des cuenta porque estás viviendo una de las mejores experiencias de tu vida.
Tranquilidad. Es totalmente comprensible que puedas llegar a perder el contacto en algún momento con tu familia y con tus amigos, pero seguro que puedes sacar algo de tiempo para hacer una videollamada y ponerles al día de tu nueva vida.
Cosas a tener en cuenta antes de ir a estudiar en el extranjero
Las dudas que asaltan a uno cuando está tomando la decisión de irse a estudiar en el extranjero son completamente normales. Es cierto que hay determinadas cosas que no se te pueden pasar por alto y que es conveniente que controles y dejes fijadas antes de irte, pero no es nada que no puedas hacer tú mismo.
Antes de viajar y comenzar tu aventura internacional, es conveniente que conozcas y domines aspectos como las lenguas que se hablan en el país elegido, la moneda que manejan, el modelo educativo en el que se basan, el tipo de vivienda que mejor se adapta a ti y la contratación de un seguro médico.
Idioma
Parece una obviedad, pero reflexionar sobre el idioma del país que vas a visitar es importante. Si tu destino es un país de habla inglesa, probablemente no tengas mayor problema para cumplir los requisitos para estudiar y para comunicarte en el día a día.
Si por el contrario optas por estudiar en un país cuya primera lengua no es el inglés, ten en cuenta la dificultad de aprender ese otro idioma que también deberás dominar para hacerte entender en tu comunidad local.
Seguro médico
La contratación de un seguro médico cuando salimos de nuestro país es una de las primeras cosas que debemos controlar antes de viajar. Enfrentarse a un sistema de salud desconocido es más fácil con un seguro que incluya las principales coberturas médicas.
Existen numerosos seguros médicos que cubren diferentes necesidades y que puedes contratar de forma rápida y sencilla a través de su página web. Puede que te parezca un gasto innecesario, pero los problemas de salud aparecen en cualquier momento y es mejor prevenir.
Vivienda, aspecto que debes tener controlado antes de ir a viajar al extranjero
La vivienda es otra de las cosas que debes tener pensadas antes de ir a estudiar al extranjero. Dependiendo de tus objetivos académicos y, sobre todo, de tu presupuesto, puedes escoger entre hospedarte con familias, vivir en una residencia de estudiantes o compartir casa.
Cada tipo de residencia tiene sus pros y sus contras. Lo mejor de vivir con una familia nativa es que no vas a parar en ningún momento de hablar tu nuevo idioma y de usarlo en situaciones cotidianas. Por su parte, en las casas compartidas y en las residencias de estudiantes gozarás de una autonomía que te hará madurar.
Moneda
La moneda, el tipo de cambio y el sistema bancario del lugar al que vayas a realizar tus estudios es otra de las cosas que se suelen pasar por alto y que luego dan algún que otro problema.
Antes de viajar, debes informarte acerca de las tarifas de envío de dinero, las comisiones o los cajeros y el resto de los puntos de retirada de efectivo entre otros aspectos. También puedes abrirte una cuenta corriente en el país de tu estancia para facilitar el cobro si es que vas a trabajar allí también.
Modelo educativo, la importancia de conocerlo antes de ir a estudiar al extranjero
Por último, el modelo educativo que ha adoptado tu país elegido para ir a estudiar es otro de los elementos que debes controlar antes de marcharte. ¿La titulación es oficial? ¿El programa de estudios de tu erasmus coincide con el programa de tu universidad? ¿Cuántos créditos debes superar? ¿Tus estudios en el extranjero son oficiales en tu país de origen?
Estas y otras preguntas debes responderlas antes de tomar la decisión de irte fuera a estudiar. Lo mejor es que contactes con expertos en movilidad educativa para que recibas un asesoramiento correcto sobre tus estudios internacionales.
Para asegurarte de que eliges el programa formativo en el extranjero que más se adapta a ti es importante que sopeses y compares toda la información que puedas recabar sobre tus estudios y sobre los países a los que quieres ir.
Recuerda que ir a estudiar al extranjero es una oportunidad única que te servirá para aprender muchísimo y no solo a nivel formativo. En Climbo World te ofrecemos la oportunidad de ir a estudiar al extranjero, mejorar tu idioma favorito y tu CV a la vez que creces de manera personal.